Nación aplica licencias no automáticas a la importación de petróleo
Es para evitar la especulación y proteger la producción local. Rigen para la compra en el exterior de crudo, gas oil y naftas.
El Ministerio de Desarrollo Productivo dispuso hoy la aplicación de licencias no automáticas para la importación de petróleo crudo, gas oil y naftas con el fin de evitar maniobras especulativas que afecten la producción local en plena crisis global por el derrumbe de los precios del barril.
Quedarán excluidas de la disposición los combustibles de aviación, nafta virgen, GLP (gas licuado de petróleo) y el fueloil (pesado para fuentes energía electrica, calderas, hornos, etc.).
Las licencias no automáticas son un procedimiento de administración del comercio dentro de las normas de la OMC y otorgan un plazo de hasta 60 días para analizar las operaciones de importación para evitar distorsiones en el mercado interno.
La medida se toma en medio de la volatilidad en los mercados internacionales por la crisis del coronavirus que en el caso de petróleo suma además diferencias entre los productores de la OPEP, principalmente Arabia y Rusia.
«Estamos pensando medidas para cuidar los empleos, la producción», dijo el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.
«Tenemos un impacto muy fuerte que ha sido la abrupta caída del precio internacional del petróleo; si bien hay una recuperación, lo cual muestra una gran volatilidad, esto plantea muchos interrogantes respecto a cómo manejar la situación a futuro. Estamos pensando medidas para cuidar los empleos, la producción y tener una actitud proactiva en ese sentido», dijo el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, a Radio El Destape.
«La caída del precio internacional afecta a una parte de la producción; sabemos que Vaca Muerta tiene costos más altos y no hacer nada significaría que ciertos pozos dejen de producir» agregó, y señaló que se consensuarán medidas con los sindicatos, las provincias productoras y las empresas.
El Ministerio llevará adelante una ronda de consultas con sindicatos, empresas y provincias productoras para monitorear la situación y evaluar próximos pasos.