Los cortes de suministro gas crecieron 250% tras los tarifazos de Macri
Un informe del Enargas indica que entre 2017 y 2018 más de 45 mil usuarios fueron desconectados por no poder afrontar las facturas.
La política tarifaria del gobierno de Mauricio Macri derivó en fuerte un incremento de los cortes del servicio de gas por falta de pago, ante un tarifazo del orden del 1.000%.
De acuerdo a un informe difundido por el Enargas, por la aplicación de la Revisión Tarifaria Integral (RTI) de 2017 aplicada por el gobierno anterior, se registró un incremento en los cortes del 249% respecto del año anterior, con un total de 39.257 suministros afectados. La tendencia siguió en aumento en 2018 con 5.978 cortes adicionales, totalizando 45.235 cortes por falta de pago.
“En esta evolución no sólo debe tomarse en cuenta la influencia de la aplicación de nuevos cuadros tarifarios, sino también de políticas económicas que tuvieron efectos altamente negativos en el bolsillo de usuarias y usuarios, en la medida en que el pago de las facturas de gas se llevó una parte importante de sus ingresos”, indica el informe.
Entre 2016 y abril 2019, cuando se aplicó el último aumento tarifario del período, la factura mensual promedio de usuarios residenciales aumentó más de un 1.000%. El incremento equivalió a 50 puntos porcentuales por encima de la inflación acumulada en 2017 y de casi 40 puntos porcentuales sobre la inflación de 2018, siempre tomando en cuenta los datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Además, la factura promedio pasó de representar un 2% del Salario Mínimo Vital y Móvil en enero de 2016 a un 11% en abril de 2019.
Las familias acumularon deudas, en muchos casos impagables en relación con sus ingresos, lo que a su vez derivó en los cortes de suministro. Ese endeudamiento, justamente para los usuarios sin suministro, pasó de 916 pesos en 2016 a 10.770 pesos en 2019 por cada usuario que no pudo pagar su factura.
En relación a los usuarios residenciales endeudados, pero con suministro, es decir, aquellos a los cuales no se les cortó el servicio a pesar de su condición de morosidad, el número pasó de 2,2 millones en 2016 a 3,4 en 2019, un crecimiento del 48%, afectando a aproximadamente 40% del universo total de usuarios residenciales durante 2016-2019, según indica el análisis difundido por el Enargas.