OIL & GAS

YPF realizó la primera fractura a gas en Vaca Muerta

YPF y Schlumberger realizaron la primera fractura con una bomba a gas de la empresa Eco2Power en Vaca Muerta.

YPF realizó la primera fractura en Vaca Muerta con un equipamiento alimentado cien por ciento a gas, una novedad para la industria petrolera local.

Se trata de la bomba de la compañía Eco2Power que comenzó a probarse en Loma Campana, el principal yacimiento productor de petróleo no convencional. La operación es llevada adelante por la compañía Schlumberger.

La prueba piloto de la bomba alimentada a gas significa un paso más que da YPF en su plan de reducción de emisiones de carbono, en un contexto en que la industria debe adoptar medidas para hacer las operaciones más sustentables, en el marco de la transición energética hacia fuentes de energía más limpias. Ese tipo de tecnología reemplaza la utilización de combustibles líquidos más contaminantes como el diesel.

La bomba ya fue testeada en laboratorio de forma exitosa en la planta de la empresa QM Equipment, en Mar del Plata. Una de sus particularidades es que cuenta con potencia de 5 mil HP, que duplica a los equipos que hoy se utilizan en Vaca Muerta. Así es que de ser exitosa, tiene el potencial de reducir la cantidad de equipos en las locaciones porque se necesitaría una menor cantidad de bombas por cada set de fractura.

El fracturador a turbina aún debe ser pasar la prueba de fuego en la cancha. Primero será utilizado en pozos de YPF durante 90 días y luego lo probarán operadoras como Tecpetrol, Pluspetrol y CGC y compañías de servicios como Wheaterford.

La bomba requiere ser abastecida por cuatro cisternas de gas comprimido (GNC) para funcionar a pleno durante 24 horas.

Se estima que luego de un año de trabajo en diversas operaciones, se podrá concluir cómo se desenvuelve el equipo en el campo de batalla, y si convence a las operadoras y compañías de servicios especiales para convertirse en el nuevo salto tecnológico en Vaca Muerta, donde el equipamiento de fractura es uno de los cuellos de botella que amenaza con frenar el boom productivo.

Hoy en la cuenca hay en operaciones ocho sets de fractura. La mayoría son flotas antiguas, cuyas reparaciones a menudo se ven comprometidas por las trabas a las importaciones.

A su vez, la industria debe adoptar rápidamente medidas para reducir sus emisiones, aún cuando el petróleo y el gas seguirán teniendo una alta demanda en las próximas tres décadas. Una ventaja comparativa que tendrá el crudo de Vaca Muerta en su salto exportador será una huella de carbono mucho más baja en relación a operaciones convencionales de otras cuencas del mundo. En ese contexto, el mismo negocio ya demanda a las compañías del sector adoptar medidas tecnológicas para hacer más amigables sus operaciones con el ambiente. El uso de motores a gas y electricidad será una opción cada vez más extendida en la industria petrolera doméstica.

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