Avanza la nueva ley de biocombustibles con respaldo de Neuquén y Río Negro
Los legisladores de ambas provincias apoyaron el proyecto del oficialismo, a excepción del diputado Schlereth, de Cambiemos. El proyecto, que obtuvo dictamen favorable, beneficia a las provincias petroleras.
Por Lorena Vincenty
Las comisiones de Energía y Combustibles, y la de Presupuesto y Hacienda llevaron adelante la votación sobre la nueva Ley de Biocombustibles, el martes, y se aprobó el dictamen en mayoría del proyecto del oficialismo. Los diputados de la región, que participan en las comisiones, opinaron sobre la iniciativa que la semana próxima podría obtener la media sanción para pasar al Senado.
El nuevo marco regulatorio establece un corte del 5 % para biodiesel, es decir la mitad que en la actualidad. En el caso del bioetanol mantiene el 12%, pero establece que un 6 % para bioetanol de maíz y otro 6 % para bioetanol de caña de azúcar.
El diputado nacional por Neuquén David Schlereth, de Juntos por el Cambio, sostuvo que proyectos de esta naturaleza ponen a las provincias productoras en disputa, porque aparecen las que buscan mantener o mejorar un sistema de promoción como el de biocombustibles, contra las que producen hidrocarburos.
Prorrogar la ley actual
Aseguró que el proyecto que obtuvo dictamen podría favorecer a las provincias que producen hidrocarburos porque baja el corte de los biocombustibles en los combustibles en general, pero también establece que ese porcentaje se puede modificar sin una nueva ley. Sostuvo que le parecía mejor extender el actual régimen hasta el 31 de diciembre de 2024, en sintonía con el proyecto de ley sancionado el año pasado por el Senado y que el oficialismo en Diputados decidió no impulsar para proponer un nuevo régimen.
“No se puede decidir una ley de biocombustibles sin tener un horizonte energético y eso es lo que falta. Desde el oficialismo, el año pasado habían prometido que se presentaría una nueva ley de hidrocarburos, que nunca apareció. No hay claridad con respecto a la política energética”, dijo Schlereth.
Schlereth: «Como provincia productora nos tiene que poner en alerta porque nos afecta. Hoy los cortes bajan, pero puede cambiar con un decreto o con una resolución de la Secretaría de Energía”.
Coincidió con las críticas de un gran sector de la oposición y afirmó que no tiene sentido que las provincias entren en disputas, cuando hay mercado para todo y se existe un potencial exportador. “Es una ley que se hizo a las apuradas. Estas cuestiones sectoriales, con parches y el lobby de algún sector, no ayudan. Muestra la improvisación del gobierno en materia energética. Como provincia productora nos tiene que poner en alerta porque nos afecta. Hoy los cortes bajan, pero puede cambiar con un decreto o con una resolución de la Secretaría de Energía”.
Respaldo con reparos
La diputada del Movimiento Popular Neuquino, Alma Sapag, acompañó el dictamen en general pero propuso reparos a la ley, algunos de los cuales se tomaron en cuenta para el dictamen de mayoría. Explicó que es importante que las empresas mezcladoras, productoras y comercializadoras de combustibles fósiles puedan asociarse o vincularse con las productoras de biocombustibles para instalar plantas de producción de primera segunda, tercera generación y de avanzada.
“El mundo dejó atrás los biocombustibles de primera generación y Argentina sólo produce este tipo, en base a materias primas de alimentos, cuando los grandes países del mundo utilizan materias primas que no son alimentos. Los productores no deberían ver riesgos, sino la posibilidad de asociarse con una empresa de gran magnitud”, justificó.
Señaló que el corte de biodiesel, del 10% actual, está entre uno de los más altos del mundo, octavo entre 70 países, y que no es razonable para países con zonas frías como Argentina. Sostuvo que esa proporción altera el buen funcionamiento de los motores y que subir el porcentaje del corte bioetanol por más del 12% puede tener un impacto en el desarrollo industrial del crudo no convencional de Vaca Muerta.
Sapag señaló que el corte actual de biodiesel está entre uno de los más altos del mundo, octavo entre 70 países, lo cual no es razonable para países con zonas frías como Argentina.
Cuestionó también el concepto de mínimo obligatorio y a los artículos que plantean la sustitución de combustibles fósiles por biocombustibles. Finalmente pidió agregar un artículo que estableciera que ninguna de las disposiciones de la ley podría ser aplicada en detrimento de las demás normas nacionales que regulan los marcos legales relacionados con la industria hidrocarburífera o energética.
«No se hizo de apuro»
Susana Graciela Landriscini, diputada nacional del Frente de Todos Río Negro, fue categórica en afirmar que hace tiempo se trabaja con seriedad en el proyecto de ley de biocombustibles del oficialismo. Explicó que en el marco de pandemia, en el que se fueron tratando temas de urgencia: presupuestarios, leyes de emergencias, moratorias impositivas entre otros y con el vencimiento la 26.093, se dio un marco excepcional.
“Se trabajó a nivel de detalle y cuestiono fuertemente a los que dicen que se hizo de apuro. Es un proyecto riguroso y sancionable como ley. Establece una política pública hasta el 2030, con la posibilidad de prorrogarse cinco años más. Se busca así dar previsibilidad”, dijo Landriscini.
La diputada y economista celebró que el Estado pueda modificar los cortes, e intervenir en los en los cupos y precios. Detalló que ante una estampida de precios en los insumos, como el maíz y la soja, el Estado puede bajar hasta un 3% el componente de biodiesel en la mezcla con los hidrocarburos fósiles para que no se disparen los precios en el surtidor. Y si aumenta la demanda de combustibles, y la producción de fósiles no se pueden garantizar, puede elevar el corte.
Landriscini: “Se trabajó a nivel de detalle y cuestiono fuertemente a los que dicen que se hizo de apuro. Es un proyecto riguroso y sancionable como ley. Establece una política pública hasta el 2030″.
Destacó que no se deja librado al libre mercado, ni a la libre competencia, ya que limita la instalación de nuevas empresas que con su desarrollo tecnológico, o su mayor escala a nivel internacional, puedan traer algún peligro para el esfuerzo promovido por las empresas de capital nacional.
“Si desregulamos la competencia los más grandes se comen a los más chicos y los más dinámicos a los que se mueven con más dificultad. La competencia debe tener regulaciones. Que se desarrollen los biocombustibles es importante, pero en momentos de baja del precio internacional de la soja o del maíz, pueden querer copar el mercado nacional de los biocombustibles, si no hay intervención», agregó la legisladora rionegrina.
Nuevas tecnologías
Mientras que el diputado neuquino del Frente de Todos Guillermo Carnaghi sostuvo que hay un nuevo paradigma en la transición energética, relacionada con el hidrógeno, la aparición de los autos eléctricos, pero no va en detrimento de los biocombustibles. “La ley fue beneficiosa para el sector y con este nuevo marco se mantienen los cortes y se da un horizonte hasta el 2030 con posibilidad de prórroga. Se escucharon a todos los sectores, se trabajó, había que realizar cambios a la ley y son los puntos que están plasmados en el proyecto”, dijo.
Carnaghi: “La ley fue beneficiosa para el sector y con este nuevo marco se mantienen los cortes y se da un horizonte hasta el 2030 con posibilidad de prórroga».
El despacho de mayoría consiguió 49 firmas -28 en presupuesto y 21 en energía- y fue respaldado por el Frente de Todos, el Movimiento Popular Neuquino, el bloque Justicialista, Frente para la Concordia Misionera, dos radicales y dos del Pro.